Tiempo después, ya a los 14, hice mi primer taller de fotografía en el instituto donde estudiaba: ¡fue mágico! Descubrí entonces que la fotografía era mi vocación, aquello con lo que me sentía viva.
Así, además de ser autodidacta, me formé inicialmente en Bilbao y a nivel profesional en Madrid, en la escuela de fotografía EFTI.